Algunas características de la globalización
La globalización se refiere a la acentuación de las interrelaciones
económicas, pero también políticas y culturales, a nivel de todo el
globo terrestre.
Por lo tanto, se le da el nombre de globalización a un conjunto de
cambios estructurales de la economía, la política y la cultura que se
producen en todo el globo terrestre a la vez y que son muy acelerados.
Estos cambios se manifiestan en un "achicamiento del mundo". Todas
las transacciones comerciales y financieras se hacen cada vez
más rápido, las innovaciones culturales recorren rápidamente el globo
y las decisiones que se toman en un país se perciben a las pocas
horas en países que están en el hemisferio opuesto.
Los elementos que actúan en la globalización son múltiples, entre
los que se destacan los siguientes:
1. Una nueva etapa de la revolución tecnológica
Esta etapa se caracteriza por la innovación permanente de la técnica
aplicada a la producción. En este momento es muy fácil instalar
una fábrica y también es muy fácil y de bajo costo desmontarla.
También la tecnología de las comunicaciones apunta a mejorar
las transacciones económicas entre los bancos del mundo.
Por otra parte, la mayor disposición de tecnología da lugar a que
se necesite menor cantidad de trabajadores. Como el capital tiene
facilidad para moverse por todo el mundo, las empresas se desplazan
geográficamente en búsqueda de mano de obra disponible
más barata.
2. La creciente mundialización de los mercados
Todos los mercados del mundo compiten entre sí con el propósito
de hacerse "más atractivos" para que el capital se instale en ellos.
La mayoría de los mercados nacionales orientan sus economías
para exportar al extranjero. Para eso, los Estados estimulan a los
empresarios a que realicen importantes inversiones en infraestructura
(transportes, energía, telefonía, etc.) y también apuntan a facilitar
la movilidad del capital para que obtenga grandes ganancias
en las bolsas de valores.
Otro rasgo de esta mundialización se observa en la creciente especialización
de los procesos de producción en cada país. Si bien
esta característica no es nueva, sí lo es su intensidad. Es común
encontrar, por ejemplo, que en un país se produce una parte de
los automóviles, y en varios otros, las restantes.
3. El creciente peso de Organismos Económicos Internacionales
Los Estados nacionales no tienen capacidad de controlar plenamente
la dinámica del capital trasnacionalizado. Por tal motivo
aceptan las propuestas de los Organismos Económicos Internacionales
–como el Fondo Monetario Internacional– para llevar adelante
las políticas económicas que facilitan la transnacionalización
del capital.
4. El mercado se transforma en el principal ámbito de decisión
En el mercado unos ganan y otros pierden al competir. Los empresarios
más rápidos y eficientes obtendrán mayores ganancias
porque sus productos serán consumidos. Los no competitivos quedan
excluidos, porque la regla básica de la globalización es la
competencia.
Ministerio de Educación de la Nación (Argentina) Ciencias Sociales Tercer Ciclo de Educación General Básica para Adultos Modalidad Semipresencial. Buenos Aires : Ministerio de Educación de la Nación.
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domingo, 22 de agosto de 2010
Civilizaciones de la Antigua Mesopotamia
Para seguir aprendiendo, les propongo observar y leer atentamente el siguiente power pointAntigua Mesopotamia
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Arquitectura y religión en el Antiguo Egipto
La organización de la sociedad egipcia, el poder del faraón, los
grandes recursos materiales y humanos utilizados en las monumentales
construcciones religiosas, los privilegios de que gozaban los sacerdotes
se explica por el papel fundamental que en la vida de los
egipcios tenía la religión. Según sus creencias, por ejemplo, los fenómenos
naturales, como la creciente del río Nilo o el movimiento de
los astros, se relacionaban con la vida de los dioses.
La religión tenía dos aspectos fundamentales: la adoración de los dioses
y la vida después de la muerte. En un principio cada ciudad tenía
sus propias divinidades agrupadas en tríadas (conjunto de tres dioses).
La más popular fue la de Osiris -el dios de los muertos-, su esposa
Isis, la Luna y su hijo Horus, que representaba la Tierra con la vegetación.
Además, era muy importante el culto al dios sol, Ra. Casi
todos los dioses locales se asociaban con él. Cuando se produjo la
unificación de los reinos, se impuso el dios de la ciudad de Tebas,
Amon, transformándose en Amon-Ra.
Los dioses se representaban con características humanas y de animales.
El mismo faraón era representado con cuerpo de león y cabeza de
hombre. El culto se llevaba a cabo en los templos considerados la
morada de los dioses.
Los templos egipcios, al igual que todas sus construcciones, eran
monumentales. Los muros estaban decorados con relieves en los
que se honraba la memoria de los dioses y la del faraón. Ramsés II
mandó construir un templo dedicado a Amon-Ra en Abu Simbel.
En la pared exterior de este templo, excavado totalmente en la roca,
se ven cuatro grandes estatuas que representan a dicho faraón.
Cuando se construyó la represa de Asuán, inaugurada en 1971, el
templo fue trasladado para evitar que quedara inundado por las
aguas de la represa. Fue una tarea titánica y costosa que demandó
cuatro años de trabajo. El templo y las estatuas fueron cortados en
bloques, trasladados y vueltos a adosar, reconstituyéndose la estructura
original.
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